Reseña cómic: pollo con ciruelas de Marjane satrapi
Pollo con ciruelas (Norma, 2005) es el penúltimo
cómic de Marjane Satrapi traducido al español, anterior a El suspiro (2011). En esta obra, como es habitual en la producción
de Satrapi, el aspecto autobiográfico también está presente, sin embargo, la
ficcionalización de la propia autora no se desarrolla ni como personaje
principal ni como narradora. Esta solo aparece en un par de viñetas, a través
de las cuales descubrimos el parentesco que la vincula con la trama: el
protagonista es su tío Nasser Al Khan.
En Pollo con ciruelas se narra la historia de Nasser Al Khan, un músico iraní nacido en la década de 1930. En concreto, se cuenta la historia del final de la vida de Nasser, en 1958, cansado del tedio de una vida en la que no se siente feliz. El desencadenante de los hechos es la destrucción de su tar[1] a manos de su mujer y la frustrada búsqueda de un nuevo instrumento. En este punto, el protagonista decide recluirse en una habitación en ayunas esperando la muerte.
Viñeta Pollo con ciruelas de Marjane Satrapi:
http://comicsoupmx.blogspot.com/2016/03/pollo-con-ciruelas.html
La muerte voluntaria y programada de Nasser, en mi opinión, es un acto de subversión y rebeldía ante la vida entendida como un tránsito automático en el que el deseo no tiene cabida. Con la pérdida de su instrumento, el cual se nos presenta como el elemento de refugio que compensa la insatisfactoria vida del protagonista, Nasser reflexiona sobre sus anhelos y expectativas no cumplidas. La tristeza por revisitar momentos dolorosos del pasado y la proyección de los cúmulos de decisiones no satisfactorias dirigen a Nasser a tomar esta decisión. Más que una crónica lacrimógena de una muerte anunciada, se yergue como un punto de reflexión sobre el poder destructor de la memoria y la excesiva autorreflexión. Nasser va a morir, y su pusilanimidad vital también tiene su correlato en su forma de morir: decide esperar en la cama hasta que la muerte venga a él. “Verrà la morte e avrà i suoi occhi”.
En cuanto a la estructura, Pollo con ciruelas se divide en nueve
partes siendo la primera una introducción y las siguientes ocho un capítulo por
día –del 15 de noviembre de 1958 hasta el 22 de noviembre– que Nasser pasa en
la cama esperando morir. A través de la recreación de los recuerdos de un
protagonista que está despidiéndose lentamente y a sabiendas de su vida,
presenciamos la narración de diferentes temas recurrentes en la literatura
universal como el amor no correspondido, los conflictos en las relaciones
paterno-filiales, la muerte de los progenitores, los ritos y tradiciones, la
memoria, etc. En tanto al tratamiento de estos temas, me ha parecido
interesante la diferente concepción de la muerte en la cultura iraní respecto a
la nuestra. Especialmente tras la lectura del pasaje en el cual Nasser recuerda
la lenta muerte de su madre por una larga enfermedad y su consiguiente aprendizaje
sobre dejar ir a un ser querido sumido en una enfermedad irreversible.
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